sábado, 5 de enero de 2013

Capítulo 43 (último)

HARRY

- Verán...- comenzó a decir la enfermera.- Nos ha costado, pero ambas están perfectamente. Lucy tendrá que pasar aquí unos días, ha perdido mucha energía...
-¿Puedo pasar a verlas?- pregunté impaciente. Ella miró para el suelo.
- Eh.. Si, supongo que si... La habitación a la izquierda, al fondo del todo.- le di las gracias y fui casi corriendo hacia allí. Me detuve enfrente a la puerta. No se oía nada. Abrí lentamente y la vi tumbada en una cama, sosteniendo a la niña en brazos. Me senté junto a ellas sin decir nada. Acaricié su pequeña cara con un dedo. Era preciosa. No pude evitar soltar un par de lágrimas. Aquel era el momento, el momento que siempre había soñado, y por fin se hacía realidad.
- Cógela.- me dijo ella de repente. Aún dudando, la cogí suavemente entre mis brazos. Era tan pequeña, tan delicada, que tenía miedo que se me rompiera al más mínimo movimiento. Al principio se retorció un poco, pero luego se acomodó y se puso a dormir.
-¿No es preciosa?- pregunté. Ella solamente asintió.-¿Estas bien? Quiero decir, supongo que te habrá costado mucho y...- rió. Una risa floja y suave, pero aún así.
- Mereció la pena.- suspiró y se tumbó en cama, visiblemente cansada. Me acerqué a ella y deposité un beso en sus labios.- Te quiero.
- Yo más, no lo dudes.
- No, te aseguro que yo más.
- De eso nada.- sonrió y cerró los ojos.
-¿Sabes? Todavía no me creo que esta niña sea nuestra hija.
- Normal, ella es guapa, no como tú.- dije de broma. Me pegó en el brazo y me dio la espalda.- Oh, venga, sabes que no es cierto.- me ignoró. Di la vuelta hasta quedar de nuevo frente a ella.-¿No me perdonas?- le di un beso que no rechazó, sino que continuó.
- Aún no estás perdonado.- dijo separándose de mi. Seguí besándola, esta vez también por el cuello. - Harry, para...
-¿Ya estoy perdonado?- asintió riendo. De pronto la niña comenzó a llorar.- Oh dios, ¿qué hago? - empecé a dar vueltas por la habitación con ella en brazos, meneándola suavemente hasta que calló y se durmió de nuevo. Me senté y resoplé.- Que difícil es esto de ser padre...
- Lo que te queda aún...
- Bueno, lo que me queda a mi te queda a ti también...
- ... por suerte.- acabó la frase. Se acercó a mi para besarme de nuevo.
-¿Por qué no nos casamos?- dije al separarnos. Por un segundo vi una expresión de terror en su rostro.
-¿Casarnos?- repitió.
- Qué mejor época que ahora.- dirigió la mirada al suelo, jugando con un mechón de pelo. -¿No quieres casarte conmigo?
- No.. Digo, si, pero.. es extraño.
- Tampoco es tan raro... Oh, no quieres casarte conmigo...
- Claro que sí... Si no te quisiese no viviríamos juntos y tendríamos una hija, ¿no?
-¿Entonces qué es lo que pasa?- pregunté de nuevo. No respondió.
- No me lo merezco.- sollozó tapándose la cara con las manos.
- No.. no pienses eso. Claro que sí, eres la chica más increíble que he conocido, por tu carácter y tu forma de ser... Yo no quiero a ninguna otra, por muy guapa que sea o el increíble cuerpo que tuviera. ¿No lo entiendes? Yo sólo te quiero a ti, quiero que seas mía para siempre y que ningún otro chico te toque.- miré sus ojos marrones. Tenían unas cuantas lágrimas. Me abrazó fuerte. Se lo di de vuelta.
- No deberías decirme esas cosas...
-¿Por qué?
- Haces que cualquiera se emocione.- sonrió.
- Entonces, ¿qué dices? Se qué no tengo ningún anillo, ni este es el lugar ni el momento más bonito para pedírtelo pero, ¿quieres casarte conmigo?- asintió antes de abrazarme otra vez. Sonreí. Aquel sin duda era el mejor día de mi vida. Once de agosto, día para recordar.

________________________________________________________________________

Hola! Aquí está, por fin, el último capítulo. Se que es muy corto, pero es que quería acabarlo cuanto antes. Me da muchísima pena terminar esta novela, y sobretodo dejar a estos personajes... Quería agradecerlos vuestro apoyo, no todas habéis estado desde el principio, pero si hasta el final, que es lo que a mi me importa... Hoy os pido que, las lectoras que se que leen la novela y no comentan, por favor lo hicieran, aunque sólo sea para decir "me gusta", me animaría muchísimo. Si queréis, contadme vuestros momentos favoritos, parejas.. En fin, lo que queráis. Pero comentad. Me haría mucha ilusión comentarios largos. Nunca he tenido muchos, ni muy largos, pero eso no me importaba, hasta hoy. Será el único y último día que os lo pido.
En fin, que espero que os halla gustado, no es uno de mis favoritos pero quería quitarme este peso de encima...
Bueno, pues eso, que os quiero muuuuuuuuuuuuuucho y vosotras sois las que me alegráis el día. Mi twitter es @hihihazza , por si queréis seguir en contacto u.u aunque no lo utilice mucho...
Os dejo el link de mi nueva novela aquí. Muchísimas gracias!

lunes, 31 de diciembre de 2012

Capítulo 42

*Mayo, quinto mes de embarazo.*

La operación del padre de Lucy había salido genial, él estaba en perfecto estado, y ella no podía estar más contenta. No paraba de darme las gracias y un montón de besos, cosa que no rechazaba...
Ya nos habían dicho el sexo del bebé. Iba a ser niña, justo lo que quería. Bueno, teniendo en cuenta de que había un cincuenta por ciento de posibilidades de que lo fuera.
-¿Qué nombre le vamos a poner?- pregunté un día de esos, en cama.
- Lo he pensado, y no se me ocurre ninguno.- suspiró.
- No te preocupes cielo, aún nos queda tiempo. Empecé a acariciarla. Noté como se estremecía.-¿Tienes frío?
- No, es por tu culpa.- contestó riendo.- Para, me haces cosquillas. - suspiró de nuevo y cerró los ojos. Al parecer no tenía muchas ganas de pensar el nombre en aquellos momentos. Pero yo no tenía sueño. Miré por la ventana que había en el techo, se veían genial las estrellas y la luna a pesar de que hacia frío. La luna.
- Luna.- dije en bajo, pero lo suficientemente alto como para que ella me oyera. Abrió los ojos y me miró.
-¿Qué has dicho?
- Luna.- repetí.- Quiero que se llame Luna.- ella también observó al cielo.
- Es un nombre muy bonito.- añadió.
- Ella también va a ser muy bonita, no lo dudo.- se quedó unos momentos en silencio. Se arrimó más a mí y me besó, haciendo que su melena cubriera parte de mi pecho.-¿A qué se debe eso?- pregunté sonriendo al separarnos.
- A que eres demasiado adorable.- rió.
-¿Entonces que piensas del nombre?
- Me encanta, pero tengo que pensarlo...

*Junio, sexto mes de embarazo*

Al final sí se llamaría Luna. Habíamos pensado también en otros nombres, como Julie, Violet, Anne, Nayla... Pero ella al final había optado por ese.

Días después habíamos ido a comprar cosas. De todo. Preparáramos una habitación al lado de la nuestra, pintada en azul muy claro, a ninguno nos gustaba el rosa ni nada así. Compráramos una cuna blanca. Por las paredes había pequeñas estanterías con todo tipo de peluches. En la gran ventana colocáramos unas cortinas de tela fina azul más oscuro. Después había todo tipo de detalles, que tardaría en contar.
Aparte de todo eso, también habíamos comprado ropa. Un montón de ropa. Como sabíamos que los bebés no tardaban nada en crecer, la habíamos comprado de distintas tallas, algunas pequeñas y otras un poco más grandes. Y biberones y cosas por el estilo, aunque Lucy era partidaria de darle el pecho, por si acaso cambiaba de opinión.

~Días después, narra Louis~

Creo que nunca había estado más nervioso en mi vida. Hoy era el día. Suspiré de nuevo mientras Liam me ayudaba a colocar la corbata.
- Louis, tranquilo, deja de sudar, si no vas a apestar todo el traje.- rió.
- A ver como estabas tú en mi lugar, ya te tocará... ¿Voy bien?- pregunté por enésima vez.
- Perfecto.- respondió Niall.- Lo único sería cambiar una cosa muy fea...
-¿El que?- pregunté escandalizado mirando mi ropa.
- Tu cara.- contestó riendo, y todos se unieron a sus risas. Le fulminé con la mirada.
- No estoy para bromas y lo sabes.- le reñí.
- Lo siento, lo siento.. Además, no es una broma.- resoplé y me miré una vez más en el espejo. El traje que había elegido Zayn me quedaba muy bien... "Que egocéntrico soy" pensé. No se cómo en esos momentos podía pensar esas ridiculeces.
Minutos después Harry asomó la cabeza por la puerta.
- Ya es la hora, Lou.- anuncio. ¿Ya? Estaba a punto de echarme a correr para no volver. Me eché una mano al pelo.
-¡Has arruinado todo mi esfuerzo!- se quejó Zayn refiriéndose a mi peinado.
- La verdad, te queda mejor así.- opinó Liam, y todos le dieron la razón. Suspiré de alivio.
- Louis, venga.- me apuró Hazza. Retoqué los últimos detalles y salimos. Nos dirigimos a la iglesia. Noté como me ponía más y más y más nervioso. Por fin llegamos, para mi alivio, o no. Entramos, ya estaba casi todo el mundo. Nuestros padres y hermanos delante de todo, detrás los amigos más íntimos y luego todo el resto de familiares y amigos. Niall se había ofrecido como padrino, a los demás no les importaba. Además, decían que él quedaba más adorable que cualquiera de ellos. Los chicos se sentaron y nosotros fuimos al altar. Ya allí, mi madre y mis hermanas me miraban y sonreían, haciendo que me sintiera más tranquilo. La música de fondo también me relajaba.

La música cambió. Era el momento. Se abrieron las puertas y apareció ella, más preciosa que nunca. Llevaba un vestido, obviamente blanco. No tenía mangas. Se ajustaba en la zona del pecho y un poco del tronco. Tenía una hilera de flores de encaje en un lateral, que apenas se notaban pero hacían un efecto precioso. Después de ajustarse caía formando ondas vaporosas, que parecían de nube. Se acercó hasta quedar enfrente mía. Tenía el pelo recogido, conservando su forma ondulada, dejando que cayeran unos mechones por el rostro, aguantados por una fina diadema plateada. Me sonrió. Noté  que también estaba muy nerviosa. El cura empezó a hablar, pero yo casi no atendía a lo que decía, sólo tenía ojos para ella.
- Louis Tomlinson, ¿aceptas a Nicole como legítima esposa, para amarla y cuidarla, hasta que la muerte os separe?
- Sí.- respondí al cabo de unos segundos mirándola a los ojos.
- Nicole Veccio, ¿aceptas a Louis como legítimo esposo, para amarlo y cuidarlo, hasta que la muerte os separe?
- Acepto.- sonreí.
- Perfecto. Yo os declaro, marido, y mujer. Louis, puedes besar a la novia.- rodeé con mis brazos sus caderas, y ella hizo lo mismo en mi cuello, y la besé como nunca antes. Oí miles de aplausos de fondo, pero en ese momento en realidad no los oia realmente.Sentí que las lágrimas caían por sus mejillas. En esos momentos era el hombre más feliz del mundo, sin duda.

*Julio, séptimo mes de embarazo*

Yo estaba cada vez más nervioso. Sabía que en poco tiempo tendría una niña en casa. Mi niña. Me imaginé como sería. Lo había echo muchas veces ya, pero ninguna me convencía. Me la imaginé rubia, morena, pelirroja.. De ojos azules, negros, grises, verdes, marrones.. Sabía que era inútil intentar adivinarlo, pero aún así yo lo intentaba.

*Agosto, octavo mes de embarazo*

El día veintiocho volvía más cansado que nunca de trabajar. Era por la tarde, y nada más entrar en casa, vi a Lucy durmiendo en el sofá con la tele encendida. Sonreí y me acerqué a ella. Le pasé una manta por encima y me tumbé a su lado. Me quedé un montón de tiempo mirándola, fijándome en cada detalle de su rosto, detalles que conocía de sobra pero nunca me cansaba de ver.

- Harry..- noté su voz en mi oído y me estremecí, sonriendo. Me zarandeó un poco, pero no me moví.- Harry... Creo que ya viene.- sollozó. Abrí los ojos inmediatamente y vi su expresión de dolor. Debía de dolerle muchísimo.
-¿Estas segura?
- Si, joder.- se llevó las manos a la tripa.- Me duele...- me levanté y la ayudé a ella. Subimos al coche enseguida, camino al hospital. Yo le acariciaba la pierna mientras conducía, para que se relajara, sin mucho efecto. Ella lo único que hacia era sollozar y soltar alguna que otra lágrima. Me mataba verla sufrir tanto.
Pronto llegamos al hospital, donde la atendieron enseguida. Me senté a esperar y aproveché a llamar a los demás. Llegaron lo antes que pudieron. Mis padres y los suyos también estaban allí. Yo no podía parar de llorar, sabía que casi seguro todo saldría perfecto, pero aún así...

No sé cuantas horas estuvimos allí, pero fueron muchas. Cada vez que pasaba una enfermera le preguntaba, pero no podía darme ninguna información útil. Cada vez me ponía más nervioso, los chicos intentaban tranquilizarme pero yo simplemente no podía. Llegó la noche. Aún no sabíamos nada. Casi todos habían terminado por marcharse, yo les había obligado,  si no se quedarían allí mucho más. Mis padres tuvieron que irse también, pero quedó mi hermana inmigro, que intentaba tranquilizarme sin éxito.

Era ya casi el amanecer del día siguiente, cuando apareció una enfermera. Estaba complemamente roja.
-Verán..- comenzó a decir.

___________________________

Hola! Aquí está, el penúltimo capítulo. Espero que os haya gustado tanto como a mi ;) He llorado muchísimo escribiéndolo, sin saber muy bien porqué. Se que lo dejo intrigante, pero así desta lo mejor para el final..¿Qué pasará?


viernes, 28 de diciembre de 2012

Capítulo 41

HARRY

*Enero, primer mes de embarazo*

Lucy ya se había instalado completamente en casa, cosa que alegraba mis días muchísimo más que antes. Al principio había sido raro, pero al cabo de varios días te vas acostumbrando. No sabía como podía haber estado viviendo sin ella todo este tiempo. Apenas se le notaba la barriga todavía. Aún era pronto, pero a veces decía que lo sentía. Y yo no podía hacer otra cosa que sonreír. Estaba en un estado de felicidad permanente que no habría conseguido eliminar con nada. Como para no estarlo...
A excepción de nosotros y Lou y Nic, los demás seguían completamente normal. Todos seguían saliendo con sus respectivas parejas, pero habían decidido esperar, no como nosotros, a dar un paso más adelante. Zayn me comentara hacia unos días que pensaba pedirle a Emily que se fuera a vivir con él, después de ver lo bien que estaba yo con Lu. Por lo que yo sabía no había ningún cambio más.    

*Febrero, segundo mes de embarazo*

Las cosas se habían vuelto un poco extrañas en casa. A veces a Lucy le daban venadas y se ponía hiperactiva, nerviosa, discutía conmigo por tonterías y cosas así. Le había preguntado a los chicos. 'Cosas del embarazo, se le pasará' me respondió Liam. Yo aún así estaba nervioso, la cuidaba y mimaba mucho, no quería que les pasase nada a ninguno de los dos. Incluso me había comprado un libro sobre eso, cosa que resultó siendo muy útil, pues acabó con las infinitas dudas que tenía.
Yo ya estaba pensando en comprar cosas y preparar una habitación para el bebé, pero Lucy decidió que aún era muy pronto. Además, aún no sabíamos si era niña o niño y eso reducía las cosas que había que comprar, de momento.  Lou llamó un día de esos, anunciando que la boda sería en junio nada más empezar el verano. Me alegraba mucho por ellos. A veces, al verlos, sin preocupaciones ni nada por el estilo me daban un poco de envidia, pero en cuanto los comparaba con nosotros, esa sensación desaparecía dando lugar a otras mucho más reconfortantes. Amor, orgullo, deseo.. Y otras muchas que, para definirlas con una palabra, tendría que inventarmela.

*Marzo, tercer mes de embarazo*

Las cosas habían vuelto a la normalidad. Bueno, más o menos. A ella ya se le notaba la barriga, y yo no podía resistirme a acariciarla siempre. Pensar que ahí dentro estaba nuestro hijo... Me producía escalofríos, en el buen sentido, claro. Lo único malo es que ella no comía tanto como antes, ni siempre estaba alegre como solía estar. Se quejaba a veces de que le dolía la tripa, pero según el libro no era malo. Y yo... Lo único que podía hacer para consolarla era darle un montón de besos y abrazos, quererla y atender todas sus necesidades. Aún así ella estaba contenta, se le veía feliz.
Poco a poco lo que Louis me comentara tiempo atrás se formaba más en mi cabeza. La banda solía quitarme un tiempo precioso, aún así Lucy no estaba nunca sola, o con las chicas o con su familia. Pero a mi me dolía dejarla siempre que me iba, a pesar de estar en buenas manos. Nunca quería dejarla sola, fuese el tiempo que fuese, aunque a ella no pareciera importante, yo sabía que si, que le encantaría que me quedase en casa con ella todo el rato. Mi 'estado de felicidad permanente' a veces se rompía, sólo por aquellas veces que la dejaba sola. Desde qué se había venido a vivir conmigo, yo me había vuelto muchísimo más sensible y protector, cosa que a veces me ponía de los nervios hasta a mi mismo. Como alguien simplemente la tocara, ya me ponía echo una furia. Según Liam, eso también se debía a 'mi embarazo', como había dicho él, parecía que yo también tenía los síntomas del embarazo. Cuando hacia ese tipo de comentarios, todos reían, incluso yo, que le ignoraba.

Poco a poco Lucy volvió a comer bien, a estar alegre y animada siempre. Muchas veces me convencía de que saliéramos, en los fines de semana, por Gran Bretaña. Pasábamos la noche en un hotel y al día siguiente volvíamos. Esas pequeñas "excursiones" parecían ponerla de mejor humor todavía, por tanto, a mi también.

*Abril, cuarto mes de embarazo*

Vinieron de nuevo los problemas. Lucy tenía insomnio, llevaba varios días sin poder pegar ojo, aparentemente sin ninguna razón. Nos habíamos pasado por el médico, pero no fue muy útil porque salimos con la misma información con la que entramos. Por nuestra cuenta probáramos muchas cosas, como tomar infusiones o ver documentales extremadamente aburridos de bacterias y cosas así. Yo me quedaba dormido en seguida, pero ella, por mucho que lo intentara, no. Muchas veces intentaba quedarme despierto, para no hacerla sentir sola, pero a las dos noches ya no podía con mi alma. Ella tampoco, se pasaba el día en del sofá a la cama y de la cama al sofá, intentando dormir, sin resultado. Me ponía triste verla así.
A los varios días de estar así, empecé a pensar que a lo mejor no podía dormir por problemas. Si, problemas que me ocultaba. Si le preguntaba, me ignoraba o simplemente negaba con la cabeza, sin ningún tipo de palabra. Sí, debía de ser eso. Pregunté a los chicos, a las chicas, nadie sabía que le pasaba.
Un día que volvía de la discográfica, me la encontré hablando por teléfono en el salón. Y llorando. Al verme entrar en seguida colgó y se quedó en silencio. Me senté a su lado.
-¿Qué te pasa cielo?- pregunté y negó con la cabeza.- Te ocurre algo, ¿con quién hablabas?- empezó a llorar más fuerte, apoyándose en mi hombro.
- Es mi padre.- sollozó. Esperé a que continuara mientras le acariciaba la cabeza intentando tranquilizarla.- Necesita.. Un transplante de pulmón.
-¿Es por eso por lo que lloras? No tienes que preocuparte, no hay peligro de que le pase nada...
- No es por eso.- dijo ella.- Ya sé que no le va a pasar nada... pero no es por eso.- repitió.- No tenemos suficiente dinero para pagar la operación. La del teléfono era mi madre, dicen del hospital que como no paguemos no podrán operarle, y si no le operan... puede que no sobreviva.- tenía el hombro mojado por sus lágrimas. Levanté su cabeza, haciendo que me mirara de frente.
- Escucha. Voy a pagaros esa operación, y no admito un no.
- Harry... No puedes, más bien, no quiero aprovecharme de ti.- continuó sollozando.
- No te estás aprovechando de mí, si lo hago es porque quiero. Ahora mismo vuelves a llamar y le cuentas todo esto a tu familia.- le limpié las lágrimas con el pulgar, haciendo que sonriera. La abracé fuerte.
- Gracias.- susurró en mi oído haciendo que me estremeciera.
- Cuando tengas un problema, tú o cualquiera de tu familia, no me lo ocultes, por favor. Sabes que puedes contar conmigo, pase lo que pase.
- Sí, lo sé, pero  no quería ser una carga...
-¿Una carga?- repetí.- Joder Lucy, tú eres lo mejor que me ha pasado en la vida. Tú.. y el bebé.- concluí acariciando su tripa por enésima vez. - Te amo.- la miré.
- Nunca me habías dicho eso.- respondió on una sonrisa divertida.
- Siempre hay una primera vez.. Te amo, te amo, te amo, te amo.- dije dándole un beso entre cada 'te amo'. Sonrió con mi sonrisa favorita.
- Bésame bien,- exigió. Sonreí y me acerqué más a ella, esta vez para darle un beso mucho más largo.

__________________________________________

Hola! Aquí traigo un capítulo.. Como decirlo.. Extraño. Si, esa es la palabra. Ya había leído más fics con capítulos distribuidos así, me pareció buena la idea y la probé, si no se haría muy larga y pesada la espera, para mi gusto xD. Bueno, lo importante es que a vosotras os guste, que espero que si. Por cierto, apenas quedan dos o tres capítulos más. Se me hace raro acabar con mi novela. Es como si una parte de mi se acabase también. Creo que le he cogido cariño a los personajes, me va a resultar difícil decirles adiós para siempre... Pero bueno, algún día tendría que acabar, y estoy deseando hacerlo para quitarme esta tensión que llevo encima estos días.
Lo más importante, quería daros las gracias a vosotras, en serio, os quiero mucho, como la trucha al trucho.

~Continuará~

miércoles, 26 de diciembre de 2012

Capítulo 40

LOUIS

Noté unos golpecitos en mi hombro. Abrí los ojos un poco, lo suficiente para ver a Nicole sonriendo casi encima mío. Me acerqué un poco a ella para darle un beso de buenos días.
- Felicidades.- me quedé un poco confuso.
- Ostras, es verdad, hoy es mi cumpleaños.- ella rió, apoyándose en mi pecho.
- Todavía no sé qué regalarte.
- Ya me has regalado mucho. Lo primero, te vas a casar conmigo.- volvió a reír y se quedó pensativa unos instantes.
- Depende. A lo mejor en el último momento te digo que no...
-¡Pero si ya estás viviendo conmigo!
- Umm... Quizás sólo me aprovecho de ti.
- Ven aquí tonta.- dije antes de abrazarla.- A todo esto, ¿por qué me despiertas?
- Bueno, hay varios motivos. Primero, aún no hemos comprado regalos para los chicos. Segundo, tenemos una casa casi vacía que hay que llenar de muebles. Tercero, es tu cumpleaños, no te vas a pasarlo en la cama todo el día. Y cuarto, ya casi es la una.
- Son cuatro razones bastante convincentes...- contesté incorporándome.- Será mejor que me vista y... Hostia, aquí no tengo ropa.- me di cuenta muy tarde. Ayer habíamos decidido ir a dormir a la nueva casa para ver que tal, y no se me había ocurrido llevar nada para cambiarme al día siguiente.
- Podemos pasar por tu casa.. Creo que tengo ropa allí. - asentí y me levanté finalmente. Me peiné un poco con las manos, debía tener unos pelos increíbles. Me dirigí al baño un momento antes de bajar.  No nos paramos mucho para desayunar, aparte de porque no había gran cosa, teníamos bastantes cosas de hacer aquel día.
- Estás muy cariñosa hoy.- le dije después de uno de los infinitos besos que me estaba dando. Se me quedó mirando unos instantes. Luego se encogió de hombros.
- Será porque es tu cumpleaños.
- Pues podría ser así siempre.- contesté riendo, a lo que ella me correspondió.- Acabaría por acostumbrarme.
- No es mala la idea, me gusta.- me besó de nuevo, esta vez con más intensidad. Pasó los brazos por mi cuello y yo puse las manos en su trasero. Enroscó las piernas alrededor de mi cintura y andé hasta quedar sentados en el sofá. No aguantaba más, iba a quitarle la camiseta hasta que me paró.
- Lou, Lou, para.- dijo riendo.
-¿Por qué?- refunfuñé.
- Aún tenemos cosas que hacer, ¿recuerdas?- asentí con la cabeza mientras ella se levantaba.
- Sería un buen regalo de cumpleaños.
- Ya te lo compensaré.- respondió volviendo a reír. Resoplé por lo bajo antes de levantarme yo también detrás de ella.
- Pues no sé como.- contesté.
- Ya se me ocurrirá algo... Por cierto, ¿qué vamos a hacer esta noche?
- La verdad, no le he pensado todavía. Mañana tenía pensado ir a Doncaster, pero prefiero quedarme aquí contigo.- le dije abrazándola por la cintura.
- No, vete con tu familia... A mí ya me tienes aquí todo el año.
-¿ Por qué no te vienes conmigo?- susurré en su oído.
- Sería un estorbo, además yo no soy de tu familia...
- Lo serás dentro de poco.- contesté rápidamente. No parecía cambiar de opinión.- Por favor.- intenté poner la cara más adorable que pude, pero no debió salir bien porque ella se echó a reír.
- Me lo pensaré.
- Perfecto, ya puedes ir haciendo las maletas, mañana a primera hora nos vamos.- ella suspiró.
- Supongo que tendré que hacerte caso... Pero venga, ahora sí vámonos, el tiempo apremia.- sonreí mientras le cogía la mano, dispuesto a salir.

HARRY

-¿Queda algo más?- pregunté arrebatándola la maleta a Lucy. Ella negó con la cabeza.
-Se me hace raro dejar mi casa.- suspiró. Le pasé el brazo por los hombros.
- Algún día tendrías que hacerlo, por qué no ahora que vamos a tener un hijo.
- Supongo que tienes razón... Cada vez que lo pienso me pongo más contenta.- sonrió. Hice lo mismo.
- Yo también...
-¿Y si algo sale mal?- me interrumpió. La miré horrorizado.-  No sé, Harry... Es posible. Si me paro a pensarlo...
- No lo pienses.- la interrumpí esta vez yo.- Nunca más. No... no va a pasar nada malo. Vais a estar perfectamente. Tú y el bebé, ya verás.
- Espero que sea niña.- añadió. Yo me paré a pensarlo. La verdad es que me daba igual, aún era pronto para saberlo, pero iba a quererlo igual fuese el sexo que fuese.
- Ojalá se parezca a ti y no a mi, si no sería demasiado feo.- se echó a reír.
- Eres muy tonto.
- Y feo.- al ver que se quedaba callada, añadí.- Ahora es cuanto tú deberías decir 'No eres feo, eres muy guapo'- dije imitando su voz, haciendo que riera.
- No eres feo, eres muy guapo.- repitió sonriendo.
- Así me gusta.- asentí.- Ahora, vámonos, tenemos cosas que hacer.-dije abriendo la puerta del coche. Subimos y dirigió una mirada a su antigua casa. Yo estaba que me salía felicidad por las orejas. Puse la radio. Estábamos cantando nosotros. Cambié la emisora en seguida.
- Por qué no lo dejas?- me preguntó ella.
- No me gusta oírme cantar. Estoy de mí mismo hasta las narices.- respondí sonriendo.
- Pues cuando cantas haces felices a miles de chicas.
- Por eso lo hago- afirmé. 
El resto del camino lo pasamos en silencio, tarareando las canciones que sonaban, y de vez en cuando cantándolas en alto. Divisamos mi casa al poco tiempo. Bueno, nuestra casa de ahora en adelante. En cuanto abrí la puerta vi a Lou y Nicole besándose en medio del pasillo. Grité. Ellos se separaron y gritaron también.
- Joder Harry, que susto.
- Eso digo yo tío. Te recuerdo que ya no es tu casa, eh.- le respondí a Louis. Levantó una ceja y me encogí de hombros.- Desde que me engañas con ella no eres bien recibido aquí.- añadí señalado a Nic.
- Se siente, es más guapa que tú.- me hice el ofendido.- Y más buena en la ca...- Nicole le tapó la boca con las manos antes de que acabara la frase, pero inútilmente, todos nos habíamos dado cuenta a lo que se refería. Lucy y yo soltamos una carcajada. 
- A mí nadie me supera, eh. Sólo hay que ver los resultados.
-¿Qué resultados?- preguntaron los dos a la vez. 
- Cierto. Vosotros no sabéis nada...- me acerqué a Lucy y le pasé una mano por la tripa.- Vamos a tener un hijo.- ambos se nos quedaron mirando, sin ninguna expresión en el rostro. Temí que no les gustara la idea. Tal vez les horrorizara. Tal vez tuvieran envidia. O tal vez, simplemente, no sabían que decir.
- Enserio?- susurró Lou al fin. Asentí.- Es genial !- exclamó. Se acercó a darnos la enhorabuena. Lucy se alejó un poco para hablar con Nic. Nos quedamos unos segundos mirándolas como idiotas. Idiotas, sí, idiotas enamorados.
- Va a ser duro.- soltó Louis.
-¿El qué?- pregunté.
- Criar a ese niño, Harry. Date cuenta que no vas a poder pasar con ellos todo el tiempo que quieras, tienes una banda, te lo recuerdo, y miles de fans. No esperarás defraudarlas, ¿no?
- No voy a defraudar a nadie... Sacaré tiempo para ambas cosas, créeme. Pero si tuviera que elegir entre una cosa u otra... Tengo claro cuál sería la respuesta.
- No nos puedes hacer esto. Sin ti.. no seríamos One Direction.
- No pienso dejar la banda.- dije.- Ya te dije que sacaré tiempo de cualquier parte.. Y en caso de no poder ser así, piénsalo, ponte en mi lugar, ¿qué harías?
- Tienes razón.- suspiró.- Has hablado de esto con ella?
- Claro que no. Tú mírala, está muy feliz... No quiero molestarla con mis tonterías.- respondí mirando a Lucy hablar animadamente con Nicole.
- No son tonterías, Hazza, aunque a ti te lo parezca. Es vuestro hijo, no creo que quiera que tu te pierdas su infancia.. O que dejes la banda. Deberíais hablarlo...- las chicas se acercaron de nuevo.
-¿De qué hablabais?- preguntó Lucy.
- Nada...- respondí mirando de reojo a Lou.
- Será mejor que nos vayamos ya...- dijo él captando el mensaje.- Solo habíamos venido  por unas cosas, además, tenemos cosas que hacer. ¡Que os vaya bien!- se despidió antes de salir por la puerta. Yo sonreí.
- Habrá que organizar un poco todo esto.- opiné señalando las maletas y bolsas. Nos pusimos manos a la obra, subimos todo a mi habitación, que ahora compartía con ella. Charlábamos de una cosa y otra, hasta que de repente se quedó callada.
-¿De qué hablabais?- repitió. La miré sin comprender.- Louis y tú.- aclaró.
 Yo suspiré, y le conté todo. No tenía otro remedio, habría preferido comentárselo mas tarde, pero sabía que no me iba a dejar en paz hasta que se lo contase. Escuchaba atentamente cada palabra, en silencio. Cuando terminé de decirle todo se quedó en silencio.
- No me había parado a pensarlo.- dijo simplemente.
- Yo tampoco, hasta que él me lo dijo.- resopló y se quedó mirando para el techo.
- No estoy como para pensarlo ahora mismo. Además, aún queda un montón de tiempo. Maloserá que no encontremos una respuesta.- respondió. La verdad, lo prefería así, tenía razón, teníamos tiempo para pensarlo. Me tiré en cama, y ella me siguió.
- Va a ser genial vivir juntos y formar una familia.- opinó.
- No lo dudo.- respondí, y era cierto. Aquello, aunque de momento no me diera mucha cuenta, era lo mejor que me había pasado en la vida, sin duda.

_____________________________________________________________________________

¡Hola! Lo primero, sé que llevo tiempo sin subir y eso, pero es que con lo de las navidades y todo esto... Ya me entendéis. Ah, por cierto, sobre la novela. No quedan muchos capítulos... Pero como ya sabéis estoy haciendo otra, aqui os dejo el link por si acaso: Nueva fanfic
Además, os lo agradezco todo a vosotras, en serio, gracias, sin vuestros comentarios o habría dejado hace tiempo.
Quería aclarar algo. Se que básicamente esta fanfic ha sido de Louis y Harry en general, pero es que son mi debilidad. No se si podré evitarlo, pero mi siguiente fanfic será asi tambien, lo intuyo.


viernes, 21 de diciembre de 2012

Capítulo 39

LUCY

-Positivo...- susurré. Sentí como mi corazón dejaba de latir por unos instantes. me giré para mirar a Hazza, que tenía la vista fija en el pequeño aparato, sin reaccionar. Una gran sonrisa se formó en su rostro. Me abrazó fuertemente. Empecé a llorar. Aquello era tan.... irreal. Era una gran responsabilidad, pero podíamos conseguirlo, no tenía ninguna duda.
-¿Sabes qué significa esto?- me dijo al oído, haciendo que me estremeciera.- Que vamos a tener un niño o niña precioso.
- No me lo creo...
- Pues créetelo. Ya verás, vamos a formar una familia...
- Pero, ¿y cuando se lo diga a mis padres?- dije yo.- ¿Y se me obligan a abortar o algo así? No quiero, Harry...
- No seas tonta... En caso de que pase eso, que lo dudo, encontraremos alguna manera de convencerlos de que no... Bueno, ya sabes. Tú tranquilízate. Me siento tan... No sé cómo explicarlo.
- Yo también- reí. Apoyé la cabeza en su hombro. Ya estaba más tranquila, pero aún así.... Iba a ser un cambio demasiado brusco, de un día para otro sabía que tenía a otra persona dentro de mí...
- Me hace gracia.- dijo Harry interrumpiendo mis pensamientos. Me giré para verle la cara.- pensar que dentro de nueve meses tendremos una pequeña Lucy en casa.
- O un pequeño Harold.- añadí. Sonrió y me dio un pequeño beso.- Será mejor que me vaya para casa ya...- dije levantándome.- Si aún encima mis padres me echan la bronca por llegar tarde...
- Voy contigo.-dijo levantándose también.
- Para que?
- Cuanto antes se lo digamos a tus padres, mejor. ¿no?.- opinó sonriendo. Suspiré y salimos de su casa. Aún no sabía cómo se lo iban a tomar ellos, pero esperaba que bien. Además, era su nieto. Me estremecí. Mis padres no me tenían cara de abuelos, para nada. Harry debió intuir lo que pensaba, pues me pasó un brazo por la cadera. Seguimos caminando hasta llegar a mi casa. El camino se me había hecho corto. Me puse nerviosa de golpe, empecé a respirar más rápido. Abrí la puerta, estaban mis padres y mi hermana en el salón. Se nos quedaron mirando.
- Hola.- dijo Harry alegre. No entendía cómo podía estar así. Mis padres respondieron al saludo, levantándose.
- ¿Qué te trae por aquí?- preguntó mi padre.
- Papá, estoy embarazada.- solté, sin más. Todos se me quedaron mirando. A mi madre se le cayó el vaso que tenía en la mano, dejando el suelo lleno de cristales.
- Hija, por dios, qué susto, no nos gastes bromas de este tipo...
- No es una broma.- le interrumpí.Intentaba calmarme , pero con ellos allí era imposible. Respiré hondo varias veces.- Podéis pensar lo que queráis, podéis echarme de casa, hacer lo que os de la gana pero no pienso perder este bebé.- miré a mi madre, que tenía los ojos llenos de lágrimas.
- Esto es genial.- dijo ella, abrazándome. me quedé muy sorprendida, no me lo esperaba .Harry nos miraba sonriendo, casi me había olvidado de que estaba allí. Sarah estaba en su mundo, y mi padre... Bueno, mi padre no tenía ninguna expresión en el rostro.
- Me alegro.- dijo al cabo de un rato. Estaba tranquilo.  Le dio un apretón de manos a Harry, y , sonriendo, subió escaleras arriba. No solía expresar mucho sus sentimientos, pero supe que no le parecía mal la idea. Estaba más feliz que nunca. Siempre había querido formar una familia, nunca me lo había tomado tan en serio. Sarah se acercó a mí. Me miró, y luego a mi barriga.
- Que guay.- dijo solamente. Se fue con mi madre, haciendo que nos quedáramos Harry y yo solos.
- Me había imaginado esto muchas veces, y por fin se ha hecho realidad.- me dijo.
- ¿Habías pensado en esto?- pregunté riendo.
- Muchísimas veces. sabía que algún día tendríamos un hijo, no lo esperaba tan pronto, pero bueno, no puedo estar más contento.
- Y yo... Oye, ¿que opinarán los demás?
- Se morirán de envidia.- respondió riendo. Hacía ya tiempo que no hablaba con las chicas, y qué mejor momento que hacerlo estos días.
- Lo pienso y aún no me lo creo.- suspiré.
- Yo tampoco, la verdad. Por cierto, podrías venirte a vivir conmigo de una vez.- comentó él.me quedé observándolo.
- No sería mala idea.- concluí. Sonrió antes de besarme de nuevo.

______________________________________________________________________________

Hey! Primero, lo siento por tardar tanto. Pero si lees mi otra novela ya sabrás por qué es ;) pero, bueno, ahora que hay vacaciones tendré mas tiempo para escribir capítulos. Ah, también siento que sea corto, pero es que no sabía que mas poner, sinceramente . Espero que os haya gustado, a mí en concreto sí, es uno de mis favoritos...
Gracias por leer... Comentad mucho!